La plantilla del Recoletas recibió la visita de un grupo de alumnos y sus profesores del Colegio El Pino de Obregón, que pudieron seguir la sesión de entrenamiento, conocer los vestuarios del equipo y fotografiarse con los jugadores
Mañana especial para la plantilla del Recoletas Atlético Valladolid que recibió la visita de los alumnos y profesores del centro El Pino de Obregón de Fundación Personas. Los visitantes pudieron conocer a los jugadores y hacer fotos con ellos, estar en el vestuario del equipo y presenciar parte de la sesión de entrenamiento de los gladiadores azules.
Los integrantes del cuadro vallisoletano dedicaron una parte de su tiempo para trasladar a la entusiasta visita su cariño y agradecerles el apoyo. Una vez llegaron a Huerta del Rey y pisaron el parqué la primera y esperada parada de los alumnos fue el vestuario del equipo.
Con un guía muy divertido como el lateral derecho brasileño, José De Toledo, el grupo de chicos y chicas de El Pino de Obregón y los docentes pudieron conocer las partes y detalles de un vestuario de balonmano, fijándose en que cada jugador y técnico tienen asignada una taquilla con la foto correspondiente. Allí también observaron las jugadas preparadas en la pizarra, que fueron explicadas de manera muy didáctica por algunos jugadores como Miguel Camino, Pablo Herrero, Álvaro Martínez y el propio Toledo, entre otros, a sus atentos huéspedes.
Después volvieron a la pista de Huerta del Rey, donde animaron al Recoletas en el entrenamiento. Tras la arenga para hacer equipo y la sesión de fotos, presenciaron parte de la sesión en la grada del recinto de juego vallisoletano.
El Pino de Obregón es un centro de educación especial que depende de la Fundación Personas y su sede se encuentra en el Camino Viejo de Simancas en un edificio amplio sin barreras arquitectónicas, que dispone de diversas salas lúdicas y asistenciales para que los chicos y chicas puedan desarrollar su actividad de la manera más confortable posible, ofreciendo una respuesta educativa adecuada a sus distintas situaciones.
Los alumnos de transición a la vida adulta que acudieron a Huerta del Rey con sus tutoras, pertenecían a dos aulas diferentes y aprovecharon esta experiencia a modo de participación en su entorno social, disfrutando con enorme ilusión esta visita y deseando que los jugadores se la devuelvan en su propio centro educativo en cuanto les sea posible.
