El pivote vallisoletano se despedirá el próximo sábado en Huerta del Rey con su último partido como jugador del Recoletas Atlético Valladolid
Otro jugador que la próxima campaña tampoco estará en Huerta del Rey es Luisma Lorasque. El pivote vallisoletano también tuvo hoy palabras de cariño y buenos deseos hacia el club, compañeros y afición, antes de que dispute este sábado su último partido como gladiador azul del Recoletas Atlético Valladolid. “Para mí han sido dos años muy especiales ya que he podido venir a jugar donde crecí como jugador y hacer historia. Porque el Atlético hizo historia con el ascenso la pasada temporada”.
“Este año también ha sido bonito por poder jugar en la máxima categoría con el equipo de mi ciudad”, añadió. “Me voy con el mal sabor de boca de haber trabajado duro esta temporada para tener una oportunidad que nunca me llegó del todo. Pero es un trabajo y hay que acatarlo. Pero me voy muy feliz de haber estado aquí y muy agradecido”.
Por último, Luisma Lorasque quiso dar las gracias a su familia, compañeros, cuerpo médico y la afición: “Gracias a mi familia, si no fuera por ellos no hubiera llegado a jugar aquí. Quiero agradecerles su apoyo en los éxitos y en los momentos malos. Dar las gracias también a mis compañeros por el mismo motivo, porque cuando todo va bien vamos bien pero cuando está mal todos tenemos errores y espero que los míos hayan podido pasar inadvertidos. También agradecer al cuerpo médico su trabajo, ya que ha sido una parte muy importante para mí y me han cuidad como si fuera un hijo. Gracias a Pedro, Pablo y David, estoy muy agradecido”.
“Por último no quiero olvidarme de la afición. Es increíble jugar en casa en partidos de presión con 2.500 personas animando, y que te sigan a todos lados, con muestras de cariño y de afecto ahora cuando me voy. Es muy especial jugar en Huerta del Rey y más siendo de Valladolid. Muchas gracias a ellos”, concluyó.